No te pido que los saques del mundo, sino que los libres del mal. Ellos no son del mundo, como siquiera yo soy del mundo.Ellos replicaron: «No tenemos más que cinco panes y dos peces; a no ser que vayamos a comprar de ingerir para todo este gentío.»Puede admitir en su correo electrónico de forma gratuita la Homilía dominical, y las reflexione